miércoles, 31 de octubre de 2012

¿Qué quieres que te diga?


Caminaba con aire ausente por la orilla del río, cada cierto tiempo se paraba, recogía una piedra del suelo, mientras la acariciaba con sus dedos sus ojos escudriñaba el cauce del río, buscando una diana invisible, sin previo aviso lanzaba la piedra hacía un destino calculado, después, se quedaba mirando las ondas creadas, durante un mínimo instante, destruidas por el discurrir del agua, atrapadas por el devenir del destino de todos los ríos, llegar al mar. Tras esto, continuaba andando, repitiendo este comportamiento a lo largo de todo el día, todos los días, desde que lo conocía.

Lo llamaban loco y no les faltaba razón.

Solo es un loco mas.

sábado, 27 de octubre de 2012

rápido

Breve y fugaz.  

lunes, 22 de octubre de 2012

No es buen día

No ha sido buen día.
¿No?
No, no lo ha sido.
Bueno, no será para tanto.
Es cierto, depende con que lo compares.
¿Es peor que el fin del mundo?
Depende a quien le preguntes.
Creo yo que eso es lo peor que puedo imaginar.
Definitivamente tienes poca imaginación.
Ya empezamos, ¿Qué puede ser peor?
Que se acabe el mundo y seas el único superviviente.
Tu eres raro, muy raro.
Depende a quien le preguntes.
Si me preguntan a mí no lo dudaría.
Ya, eso no cambia lo dicho, ha sido un mal día.
Aun respiras.
Si, es cierto, ando, como y después cago, tienes muy poca imaginación.
Un día te partiré la cara.
Puede ser, todo es posible, lo dicho, tienes muy poca imaginación.
¿Porqué ha sido un mal día?
Por todo y por nada.
¿Algo en concreto?
Lo más divertido esta conversación.
Sin duda, has tenido un mal día.

sábado, 20 de octubre de 2012

sueltas


Negociemos con la parte esquiva, negociemos condiciones de rendición,
entonemos el mía culpa y pidamos perdón.

Amputemos nuestras penas, recopilemos los miedos
y dejémoslos en el  pozo mas profundo.

Recordemos no recordar lo que nos pueda dañar,
repitamos las mentiras que nos puedan ayudar.

Miremos a los demás sin miedo por el temor al que dirán,
despreciemos sus miradas e ignoremos sus lamentos.

No tengamos en cuenta el invierno, esperemos siempre al verano,
esperemos siempre que lo mejor está por llegar.

Dejemos de maldecir al mundo, de querer romper a llorar,
dejemos al egoísmo morir y levantémonos para vivir.

No olvidemos amar, ser y rezar pidiendo paciencia,
paciencia eterna para aguantar.

Cuando las miradas se encuentren y al corazón duelan,
no cejemos en luchar hasta llegar a triunfar.

Los tiempos son y serán tanto o mas duros de lo que podamos imaginar,
aun así no quedará otra que luchar.


quejas

Las conversaciones, las palabras, la música atravesando los momentos, las lágrimas cayendo del cielo, la piel  supurando eternidad, la cabeza abrazando la locura, los pies cansados y el terror acechando.

Donde quieras que estés, aunque baje un ángel y te abrace, un rayo centelleante te atraviese, resquebrajándote, tu cuerpo desaparezca en un segundo inmortal, entonces te sentirás especial.

Una daga atravesando tus carnes, tus huesos blanqueados al sol, todos muertos a tu alderredor, se pierde el control, la memoria es lenta en recordar,  la muerte volverá a gobernar.

Locuras de vida, locuras de almas, locuras de vueltas, locuras de palabras, locuras de hazañas... locuras, locuras, locuras, locuras.

Un loco para los locos, un sobrio entre borrachos, borracho entre los sanos, sano entre los enfermos, de un mudo para los sordos.

martes, 16 de octubre de 2012

déjame

Cuéntame un cuento:
donde las niñas no sean princesas, donde los niños no sean futbolistas.

Haz un relato corto o una novela gris:
donde los malos sean por necesidad, los buenos por convicción.

Muéstrame un cuadro melancólico:
donde el miedo sea para recordar y la felicidad para sentir.

Canta la canción mas larga:
donde la música embargue, donde la letra te haga pensar.

Mírame con esos ojos:
para llenarme de paz, para creer en la verdad.

Tócame con esas manos:
para abrigarme con tu calor, para sentir tu pasión.

Déjame escuchar tus silencios,
déjame creer en tus abrazos,
déjame vigilar tus besos.

Por siempre jamás mis días sean tus días, mis años tu vida,
mi energía  el carbón que se ha de quemar para tu felicidad.

Permite que un alma rota intente recomponer sus pedazos a tu lado,
entiende las mil caricias, las que se quisieran por cada segundo.

Querrás consentir que este ser, nacido de mil lamentos,
pueda seguir a tu lado, siempre aquí en tu regazo.

Algo que era, se detuvo al querer morir allí donde tu corazón
repose, en esta vida, en la venidera, en la que fue y en la que será.

Y aunque la vida fuera irreal, bendita mentira, eterna locura
que me ancla en este mar bravío, encadenado suplicante de tu amor.

Cuando no estás aquí, a mi derredor, que poder decir,
solo puedo pensar: vuelve pronto junto a mí.

Te dejaré escuchar mis silencios,
mis abrazos columnas irrompibles,
mis besos solo tuyos.


Generalizando que es gerundio.

Y ¿Qué piensas?
¿Sobre qué?
En general, ya sabes.
No, en eso te equivocas.
¿En qué?
En la generalidad.
¿Qué quieres decir?
Es muy sencillo: no tengo ninguna opinión en general.
Eso es imposible, sólo generalizando se puede opinar.
Te lo repito: en eso te equivocas.
No lo entiendo, ¿Cómo puedes dar una opinión sobre un tema sin generalizar?
Intento no darlas.
Nunca las das entonces.
Al contrario, doy muchas.
Ponme un ejemplo.
Sin ir mas lejos tú mismo estás equivocado.
¿En qué?
Seguramente en todo.
¿Por qué?
Porque generalizas.

lunes, 15 de octubre de 2012

Okan

Estudiamos todas las palabras, sincronizamos nuestras posturas y oteamos el horizonte, llamamos, con dolor infinito, lo que nos fue arrebatado.

Nos encontramos recitando, en mil idiomas, mil maneras de ser que no entendemos, entonamos suplicas al viento de nuestra inocencia.

Intentamos entender el odio que en ocasiones nos gobierna y nos divierte, nos miramos al espejo de la duda, creciendo el placer del temer.

El camino fue largo, la noche, en alguna ocasión, se hace eterna.

La simplicidad es tan inmediata que nadie la entiende, la navaja se desvanece.